Un caso federal expone cómo opera esta red extrema
El Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ) publicó hoy una acusación federal que vuelve a encender las alertas sobre la red conocida como “764”, una organización digital vinculada con explotación sexual de menores, chantaje psicológico y tácticas de manipulación extrema.
El acusado es Erik Lee Madison, de 20 años, residente de Halethorpe, Maryland, quien enfrenta:
tres cargos de explotación sexual de un menor,
tres cargos de coerción y seducción de menores,
y un cargo de ciberacoso.
Según el DOJ, entre noviembre de 2024 y septiembre de 2025, Madison habría persuadido, inducido, atraído y coaccionado a tres menores femeninas para producir y transmitir material sexual explícito. A una de las víctimas también habría acosado digitalmente.
El comunicado enfatiza que se trata de una acusación, no de una condena: Madison es considerado inocente hasta que se demuestre lo contrario.
Qué es la red 764 y por qué preocupa a las autoridades
La red “764” ha sido descrita por autoridades federales como una agrupación Nihilistic Violent Extremist (NVE), una categoría que combina:
explotación sexual infantil,
manipulación psicológica,
incitación al auto-daño,
difusión de contenido extremadamente violento,
dinámicas de chantaje y coerción digital,
y elementos de extremismo violento.
El FBI y analistas de seguridad la han calificado como una de las amenazas más perturbadoras del ecosistema digital actual.
En palabras de autoridades estadounidenses, este tipo de prácticas representan “terrorismo moderno” debido al impacto emocional, psicológico y social que generan en menores.
Más que grooming: una forma sofisticada de explotación
Este caso muestra que los riesgos para los niños en línea han evolucionado. La explotación digital ya no se limita a conversaciones privadas o solicitudes de imágenes. Las redes como 764 emplean tácticas más profundas, entre ellas:
presión en tiempo real,
amenazas de exposición,
transmisiones en vivo como herramienta de manipulación,
exigencia de autoproducción de contenido sexual,
control emocional continuo,
chantaje prolongado.
Estas dinámicas convierten la explotación online en un fenómeno que mezcla abuso sexual, violencia psicológica y estrategias propias de grupos extremistas.

Un problema que trasciende fronteras
Aunque este caso es investigado en Estados Unidos, la estructura de la red es transnacional. Los miembros operan desde múltiples países, usando plataformas y aplicaciones de uso cotidiano entre niños y adolescentes.
Esto implica que ningún país está completamente aislado de estos riesgos, incluido Ecuador. Las plataformas son globales, las conversaciones son globales y los predadores también.
Qué deben saber madres, padres y cuidadores
Este tipo de casos no deben generar pánico, sino información y prevención. Los patrones identificados en la investigación del DOJ permiten extraer señales claras para las familias.
1. La manipulación emocional es la herramienta central
Los predadores se presentan como amigos, pares o confidentes, generando dependencia emocional.
2. La coerción aparece más rápido de lo que imaginamos
Los menores pueden recibir presiones, amenazas o chantajes en cuestión de días, no meses.
3. No siempre hay violencia explícita
Muchas víctimas acceden por vergüenza, culpa o confusión emocional.
4. El silencio de los menores es común
Por miedo, los niños rara vez cuentan lo que ocurre. De ahí la importancia del diálogo seguro.
Cómo actuar desde la crianza digital
Estas prácticas exigen que los adultos adopten un rol activo en la vida digital de los niños. Algunas pautas esenciales:
Hablar antes de prohibir
El diálogo abierto y frecuente es la mejor herramienta de prevención.
Definir reglas claras y realistas según la edad
Incluyen:
qué plataformas pueden usar,
quiénes pueden contactarlos,
qué hacer ante mensajes incómodos o solicitudes inusuales.
Observar cambios en el comportamiento
Alertas típicas:
esconder dispositivos,
irritabilidad al recibir mensajes,
aislamiento repentino,
miedo o ansiedad sin explicación.
Tener un plan si ocurre una situación de riesgo
No eliminar evidencia.
Capturar pantallas.
Contactar a autoridades y especialistas.
Acompañar al menor sin culpa ni juicio.
El dato
La red 764 es considerada por autoridades federales como una de las amenazas más graves para los menores en internet, no solo por la explotación sexual, sino por la combinación de violencia emocional, manipulación ideológica y dinámicas propias de extremismo digital.
Comunicado oficial del Departamento de Justicia de EE.UU.
U.S. Department of Justice – District of Maryland, 20 de noviembre de 2025.






